El baile de la artista


Tras el aplauso desconocido hubo silencio roto.
-desencantada, ella sentía que-
El mundo se había vuelto teatro;
una tragedia de encuentros con extraños.
inmóvil, como de costumbre, observaba
En la sala no quedaba más que el aire condensado de los cuerpos vacíos;
no quedaba más que el eco unísono de conversaciones triviales.


En sus ojos azules crecían las raíces de un deseo por vivir sin el ansia de la espera  
Tenía la certeza de que había un viaje esperándola,
entrelosrincones deaquellahabitación oscura
Sintió al fin ese espasmo que la haría enloquecer,
En efecto, sabía que no tenía la oportunidad de elegir
tenía que estar lejos;

Lejos;
una cualidad el tiempo
una obligación espacial
un modo de habitar un mundo propio